En diálogo con Multimedio UNLaR, Meloni, graficó la situación actual de las pequeñas y medianas empresas (pymes) en Argentina como "crítica y alarmante", además se alarmó por la velocidad con la que se producen los cierres de negocios, que "ya han alcanzado los 10.000 en solo seis meses. Si esta tendencia continúa, podríamos encontrarnos con 40.000 pymes cerradas, lo que generaría un impacto devastador en el empleo y la economía del país".

Meloni destaca que tras las inversiones en el sector textil, "hoy la realidad es que esta apuesta ha llevado a un exceso de capacidad ociosa. El 60% está ocioso, y eso es un desafío en medio de la crisis", explicó y trazó una comparación con otras épocas de Argentina: "La principal diferencia con crisis anteriores es la velocidad a la que se están produciendo estos cierres. A modo de comparación, en la época de Macri, hubo 28.000 cierres en cuatro años; en lo que va de este año, ya se han cerrado 10.000".

"Esta crisis se ve agravada por un contexto de precariedad laboral y un aumento en la tasa de desempleo, que ha pasado del 5% al 7.5%. La gente se pregunta cuánto más se puede esperar, mientras muchos trabajadores enfrentan la posibilidad de quedarse sin empleo o cobrar sueldos recortados", ilustró y subrayó que "ante este panorama, más allá de los diálogos con el gobierno nacional, las decisiones parecen estar ya tomadas desde los niveles más altos de la presidencia y el Ministerio de Economía, donde se dictan políticas centradas en un rígido déficit cero y un superávit fiscal".

El empresario textil, dijo además que "el contexto de esta crisis se enmarca en un acto social, gremial, empresarial, sindical y político donde se ha planteado la necesidad de cuidar el mercado interno y no aumentar los precios. Para ello debemos desarrollar el país" y aclaró que "ya no se habla de países desarrollados del primer mundo, sino de países industrializados"

Meloni se advirtió que, lejos de la famosa V de la que habla el presidente, "la pobreza en el país se estabiliza en niveles alarmantes como el 40%, generando una sensación de desesperanza. Estamos en una especie de L, donde se llega a un piso, pero no se vislumbra ninguna mejora", y señala que "el riesgo de repetir errores del pasado, como aquellos ocurridos durante el régimen del uno a uno, es una preocupación constante y la dolarización, como se propone en algunos círculos, es una utopía peligrosa ya que cambiar el modelo hacia una estabilidad que genere desigualdad y falta de movilidad social no es el camino que queremos seguir".

El vicepresidente de Pro Tejer hizo un pedido de reactivación urgente de las industras, ya que salvo La Rioja y Catamarca donde es muy fuerte y positiva la intervención del estado para fortalecer a las industrias, la crisis del sector textil y el empobrecimiento generalizado son una realidad que requiere atención inmediata.

"No se puede resucitar a un muerto, por lo que si el Estado nacional no atiende la problemática del sector, luego será imposible recuperar las empresas que ya están cerrando sus puertas" enfatizó y señaló que "esperábamos una luz al final del camino, pero lo que vemos es que se viene la luz de un tren que nos va a chocar, con lo cual la situación es por demás alarmante".

La Rioja como ejemplo

El empresario textil se refirió en dos oportunidades, durante la charla, al valioso aporte que efectuó el gobierno de La Rioja para potenciar a las industrias del sector, fortaleciendo la capacitación con la usina de empleo y apoyando el empleo femenino en las fabricas del parque industrial riojano. "Es muy interesante lo que pasó en La Rioja, porque quedó demostrado que las políticas de Estado, con los empresarios y las industrias motorizan de manera positiva a todo el sector", remarcó.

"Lo que hizo la provincia fue fabuloso, yo estuve acompañando algunas acciones como el lanzamiento de escuelas de oficio que me pareció muy atinado. Además el gobierno te entregaba los galpones, de fábricas que habían cerrado en la època de Macri, en perfectas condiciones para que se instalen nuevas industrias, por éso digo que La Rioja y Catamarca son claros ejemplos a seguir", finalizó.